miércoles, 31 de agosto de 2016

Pollo con tomate y manzana


Hay muchas maneras de cocinar el pollo y todas están muy buenas, aunque no se si alguna vez lo habéis cocinado con manzana.
¿No lo habéis hecho nunca?
Pues hoy os traigo una receta con esta fruta que seguro que os va a gustar. Una forma diferente de cocinarlo y con un resultado buenísimo...

Ingredientes:
-4 muslos de pollo
-300 gr de tomate frito (mucho mejor si es casero, aunque también podéis
 ponerlo de bote)
-3 manzanas tipo Golden
-1/2 vaso de vino blanco
-30 gr de piñones
-1 pastilla de caldo de pollo
-Aceite de oliva virgen extra
-Pimienta negra molida
-Zumo de medio limón
-Sal

Elaboración:
Sazonamos el pollo con sal y pimienta y lo freímos, en una cazuela con un  poco de aceite de oliva, hasta que esté dorado por todos lados. Lo retiramos de la cazuela y lo reservamos en un plato.
Pelamos las manzanas, las cortamos en dados y las rociamos con el zumo de limón. En el mismo aceite donde hemos frito el pollo, salteamos las manzanas hasta que estén doradas. Cuando comiencen a tomar color añadimos los piñones para que se doren un poco. Vertemos el vino y dejamos evaporar unos minutos.
Ahora añadimos el tomate frito y la pastilla de caldo disuelta en medio vaso de agua caliente. Volvemos a poner el pollo en la cazuela y lo dejamos cocer a fuego suave, durante unos 20 o 30 minutos, removiendo de vez en cuando.
Y ya podemos disfrutar de este buenísimo pollo con tomate y manzana...
¡Que aproveche!



viernes, 12 de agosto de 2016

Pechugas de pollo gratinadas



Hoy tocan unas pechugas de pollo gratinadas con bechamel, con las que seguro triunfaréis, ya que gustan tanto a mayores como a pequeños, y lo mejor de todo, son muy fáciles y rápidas de hacer...

Ingredientes:
-2 pechugas de pollo fileteadas
-Pan rallado de ajo y perejil
-1/4 de cebolla
-2 cucharadas de harina
-1 huevo
-Leche
-Jamón picado fino
-Queso rallado (el que más os guste)
-Nuez moscada
-Aceite de oliva virgen extra
-Sal

Elaboración:
Sazonamos los filetes de pollo y los pasamos primero por el huevo batido y luego por el pan rallado. Ponemos al fuego una sartén con abundante aceite de oliva virgen extra y cuando esté bien caliente, freímos los filetes hasta que estén doraditos. Los colocamos en una fuente apta para el horno y los reservamos.
Ahora hacemos la bechamel, a mi me gusta ponerle un poquito de cebolla, así que lo primero que haremos será picar la cebolla muy pequeñita. En una sartén calentamos un par de cucharadas de aceite de oliva y pochamos la cebolla hasta que esté blandita, añadimos la harina y rehogamos un poco para que pierda el sabor a crudo. Ahora vamos incorporando la leche sin dejar de remover y poco a poco para que no se formen grumos, ponemos una pizca de nuez moscada y sazonamos. Dejamos hacer hasta que espese y esté bien hecha. Añadimos el jamón picadito y vertemos la bechamel sobre los filetes de pollo. Rallamos el queso por encima y metemos la fuente en el horno hasta que quede doradito. Y ya están listas...
¡¡Buen provecho!!

lunes, 8 de agosto de 2016

Tarta de queso y galletas de canela



¡Me encantan la tarta de queso y las galletas de canela! así que tenía que probar esta tarta de queso y galletas de canela o sí o sí...
Se trata de una especie de milhoja de galletas de canela y queso. Esta tarta no necesita horno, es sencillísima y servida bien fría es toda una delicia.
Una tarta ideal para un domingo, como el de ayer, o para tomar de postre cuando tenemos invitados.

Ingredientes:
-1 paquete de galletas de canela tipo Napolitanas
-500 ml de leche (en mi caso semidesnatada)
-250 gr de queso Mascarpone (también puede ser tipo Philadelphia)
-1 sobre de preparado para hacer cuajada
-5 cucharadas de azúcar
-1 cucharadita de esencia de vainilla
-Canela en polvo para decorar

Elaboración:
Separamos medio vaso de leche y ponemos el resto en una cazo a calentar. En la leche que hemos reservado disolvemos el sobre de preparado de cuajada, removiendo bien para que no queden grumos. Cuando la leche del cazo esté caliente añadiremos el azúcar, la esencia de vainilla, el queso Mascarpone y la leche con la cuajada. Removemos bien hasta que todos los ingredientes se integren y no quede ningún grumo. Seguimos en el fuego, removiendo sin parar, hasta que la leche hierva y empiece a espesar un poco (no hace falta que espese mucho porque después cuajará en el frigorífico).
Ahora iremos montando la tarta por capas. Para ello podemos utilizar un molde desmontable, como es mi caso, o una fuente de cristal; si usáis la fuente deberéis untarla con un poco de mantequilla para facilitar después el desmoldado.
Pondremos primero una capa de galletas de canela cubriendo bien todo el fondo del molde, después una capa de crema de queso, y continuaremos alternando capas hasta poner por lo menos cuatro de cada una, terminando con una de crema. Ahora metemos el molde en el frigorífico como mínimo tres o cuatro horas (mucho mejor si la hacemos de un día para otro).
Después, a la hora de servir, pasaremos un cuchillo mojado en agua por el contorno de la tarta y veremos que se despega de las paredes del molde con bastante facilidad. Retiramos el aro desmontable y colocamos la tarta  de queso y galletas de canela sobre el plato o bandeja donde vayamos a servirla. La espolvoreamos con canela molida (en mi caso he utilizado una plantilla de flores para decorar) y ¡lista para servir!







viernes, 5 de agosto de 2016

Magro de cerdo en adobo

                         

El magro de cerdo es una de las partes de este animal que menos grasa tiene, hoy la vamos a cocinar en adobo, una forma muy sencilla de elaborarla y con un resultado muy sabroso.

Ingredientes:
-1 kg de magro de cerdo
-2 cucharadas soperas de pimentón dulce
-6 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
-2 cucharadas soperas de vinagre de vino
-2 dientes de ajo
-1/2 cucharada de postre de orégano
-1/2 cucharada de postre de perejil
-1/2 vaso de vino blanco
-Pimienta negra
-Sal

Elaboración:
En un bol grande, ponemos todos los ingredientes para el adobo: el pimentón, el aceite de oliva, el vinagre, los dientes de ajo picaditos, el orégano, el perejil, un poco de pimienta negra molida, y la sal. Removemos para que todos los ingredientes se mezclen bien, añadimos el magro de cerdo cortado en trozos no demasiado grandes y removemos otra vez para que la carne se impregne bien del adobo. Tapamos el bol y lo metemos en la nevera como mínimo dos o tres horas, mejor de un día para otro.
Cuando la carne haya tomado bien el adobo, ponemos una cacerola al fuego con dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra; cuando el aceite esté bien caliente ponemos la carne adobada y la dejamos hacer, moviendo de vez en cuando, hasta que pierda el color de carne cruda. Ahora añadimos el vino y dejamos un par de minutos para que evapore el alcohol. Añadimos un vaso de agua y dejamos hacer a fuego lento hasta que la salsa reduzca y la carne está bien tierna ( si es necesario se puede añadir un poco más de agua).
El resultado es un plato de magro de cerdo en adobo con un intenso e inigualable sabor. Si quieres puedes acompañarlo como yo, con unas patatas fritas cortadas en tacos y puestas en la salsa unos minutos antes de retirar la carne del fuego, para que se impregnen bien del sabor del adobo. Y ¡listo! ya tenemos un plato muy completo y sabroso.