Hoy os traigo una tarta fácil de hacer, que no lleva muchos ingredientes y que queda super refrescante. Ideal para el verano aunque a mi me gusta en cualquier época, muy recomendable si os gusta el limón, una tarta de limón sin horno.
Ingredientes:
-300 ml de leche evaporada Ideal
-150 ml de zumo de limón recién exprimido
-150 ml de agua
-150 gr de azúcar
-1 sobre de gelatina de limón, yo marca Hacendado
-1 bolsa de bizcochos de soletilla o sobaos, lo que más os guste
-Caramelo líquido
Elaboración:
En un cazo ponemos el agua y, cuando rompa a hervir,añadimos el sobre de gelatina, lo retiramos del fuego, lo removemos bien hasta que la gelatina quede bien disuelta y lo dejamos templar un poco.
Mientras tanto, con ayuda de una batidora, batimos la leche evaporada con el azúcar. Cuando la gelatina esté templada le añadimos el zumo de limón y vamos incorporando, poco a poco, la leche mientras batimos con la batidora. Veremos que irá espesando un poquito. Ahora caramelizamos un molde, ponemos encima la crema de limón y cubrimos toda la superficie con los bizcochos o los sobaos, según hayamos elegido. Aunque los bizcochos queden arriba al terminar el montaje de la tarta, cuando demos la vuelta para desmoldar, estos quedarán de base.
Metemos el molde en el frigorífico por lo menos cinco horas, mucho mejor si lo dejamos de un día para otro. Desmoldamos la tarta de limón como si se tratase de un flan, la decoramos a nuestro gusto y la servimos bien fresquita.
¡¡Unmmmm, deliciosa!!
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