Costillas asadas

Hoy os traigo una receta de costillas de cerdo asadas con patatas. Las costillas al horno no solo son deliciosas, si no que además son muy fáciles de preparar. Podemos usar costillas ya troceadas, pero si asamos el costillar entero, la carne quedará mucho más jugosa. Para darles un toque especial a estas costillas asadas, vamos a marinarlas en un adobo que conseguirá que queden muy sabrosas. Por fuera quedarán doradas y por dentro muy suaves y jugosas. Además a la vez que asamos las costillas, haremos unas patatas que nos servirán como guarnición del plato.

Ingredientes:
-1 costillar de cerdo de 1 kg aproximadamente
-6 dientes de ajo
-2 cucharaditas de orégano
-1 cucharadita de pimentón dulce
-1 cucharadita de sal
-120 ml de vinagre
-150 ml de aceite de oliva virgen extra
-3 o 4 patatas grandes

Elaboración:
Para preparar nuestras costillas asadas, lo primero es hacer el adobo. Ponemos en el mortero los ajos pelados junto con la sal y los majamos bien. Añadimos el orégano, el pimentón, el vinagre y el aceite de oliva virgen extra y mezclamos con una cuchara. Ponemos el costillar en un recipiente y vertemos el adobo por encima impregnándolo bien por todos lados. Dejamos marinar en la nevera un par de horas.
Cuando haya marinado colocamos las costillas  en la fuente del horno con todo su adobo. Pelamos las patatas, las cortamos en dados de tamaño medio y las ponemos en la bandeja del horno, alrededor del costillar.
Metemos la fuente en el horno precalentado a 200ºC con calor arriba y abajo y dejamos hacer las costilla durante unos 45 o 60 minutos. A mitad de cocción le daremos la vuelta y regaremos tanto la carne como las patatas con el adobo.

Las serviremos recién sacadas del horno y acompañadas de las patatas.
¡Para chuparse los dedos!

Pan casero fácil y rápido

Tenía muchas ganas de hornear pan en casa pero no terminaba de decidirme y hoy por fin lo he hecho.
La receta la vi en un vídeo de Facebook  y me pareció tan sencilla que me puse manos a la masa. He preparado una hogaza de pan casero con harina de trigo de todo uso, sin apenas amasado ni levado. El resultado ha sido muy bueno, queda una corteza crujiente y una miga tierna y esponjosa. Me ha gustado tanto que no tardaré en volver  hornear pan.
Un pan fácil y rápido, ideal para principiantes como yo.
Animaros a probarlo y me decís si os ha gustado.

Ingredientes:
-500 gr de harina de trigo
-350 ml de agua tibia
-1 sobrecito de levadura deshidratada
-15 gr de azúcar
-10 gr de sal
-3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

Elaboración:
Lo primero que haremos para preparar nuestro pan casero es hidratar la levadura y para ello, ponemos un poco del agua tibia en un bol y agregamos el sobrecito de levadura y el azúcar. Removemos con una cuchara de madera hasta que la levadura se haya disuelto por completo.
En otro bol amplio ponemos el resto de agua tibia, la levadura hidratada, las tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra y cinco cucharadas soperas de harina. Mezclamos bien y cuando todo esté bien integrado, tapamos el bol con un paño limpio y lo dejamos reposar, a temperatura ambiente, unos 20 minutos. Pasado ese tiempo incorporamos el resto de la harina y la sal. Vamos  incorporando harina y mezclando hasta que la masa quede muy espesa. Ponemos un poco de harina sobre la encimera de la cocina y volcamos la masa del bol sobre ella. Nos untamos las manos con un poco de aceite de oliva, para que la masa no se nos pegue, y amasamos durante un par de minutos. Formamos una bola con la masa y la volvemos a colocar en el bol previamente enharinado para que la masa no se pegue a las paredes. Tapamos con el paño y la dejamos reposar unos 30 minutos a temperatura ambiente.
Cuando haya pasado ese tiempo, volvemos a poner la bola de masa sobre la encimera enharinada y amasamos un poco más para quitar el aire al pan. Formamos una bola de nuevo y la colocamos sobre la bandeja del horno. Con un cuchillo hazle un par de cortes y espolvoreala con un poco de harina para darle un aspecto rustico al pan.
Colocamos la bandeja en el horno apagado y frío. Encendemos el horno a 200ºC y horneamos durante 45 minutos con calor arriba y abajo.
Cuando saquemos el pan del horno lo colocamos sobre una rejilla para que se enfríe y la base no se humedezca.
¡¡Buenísimo!!