sábado, 30 de marzo de 2019

Rin Ran de Cazorla


Hoy os propongo preparar una de las recetas tradicionales de mi tierra, Jaén, el Rin Ran de Cazorla.
El rin ran es una ensalada a base de patata con bacalao, aceitunas y huevo, típica de la Sierra de Cazorla desde tiempos antiguos. Este es un plato que se puede  servir como tapa, entrante, acompañante de otros o como plato principal. Se puede servir tanto frío como caliente, es cuestión de gustos, nosotros en casa lo tomamos frío.
En estos platos en los que el aceite se utiliza en crudo, es muy importante que éste sea virgen extra y de muy buena calidad. Yo he utilizado el aceite de oliva virgen extra Conde de Benalúa Especial.

Ingredientes:
-3 patatas medianas
-250 gr de bacalao desalado
-1 cebolleta
-2 huevos cocidos
-2 dientes de ajo
-2 cucharadas de carne de pimiento choricero
-1 cucharadita de comino
-Aceite de oliva virgen extra
-Aceitunas
-Sal

Elaboración:

En una olla  con agua y sal, ponemos a cocer las patatas peladas y cortadas en trozos irregulares. Cuando las patatas estén tiernas las retiramos del fuego y las escurrimos, guardando un poco de agua de la cocción. A continuación ponemos las patatas en un recipiente y las chafamos con un tenedor.
En un mortero ponemos los ajos pelados y el comino y los machacamos bien. Ahora ponemos en el mortero la carne de pimiento choricero y un poco del agua de la cocción que habíamos reservado y mezclamos. Añadimos este majado a las patatas.
Cortamos la cebolleta en trocitos pequeños y la añadimos a la patata, reservando un poquito para decorar el plato. Ponemos también un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Mezclamos hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
Colocamos el puré en el recipiente donde lo vamos a servir y ponemos por encima las aceitunas, el bacalao desmigado, la cebolleta que habíamos reservado, el huevo pelado y cortado en cuatro trozos y una tira de pimiento rojo. Para terminar el plato ya solo nos queda ponerle por encima otro chorrito de aceite de oliva virgen extra, en mi caso Conde de Benalúa Especial.
Y ya tenemos listo nuestro Rin Ran de Cazorla.




jueves, 28 de marzo de 2019

Pechuga de pollo guisada con tomillo



La receta de hoy es pechuga de pollo guisada con tomillo, un plato que como casi todos los guisos, es muy económico y fácil de hacer. Y es más, podrás guardarlo de un día para otro porque estará incluso mejor que recién cocinado. Para preparar esta receta de pollo necesitaremos los siguientes ingredientes.

Ingredientes:
-2 pechugas de pollo deshuesadas y cortadas en tacos
-1 cebolla
-1 zanahoria
-1/2 pimiento rojo
-3 o 4 dientes de ajo
-1/2 vaso de vino blanco
-2 vasos de caldo de pollo
-1 cucharadita de carne de pimiento choricero
-2 hojas de laurel
-1/2 cucharadita de tomillo seco
-Aceite de oliva virgen extra
-Pimienta negra molida
-Sal

Elaboración:
Para preparar la pechuga de pollo guisada con tomillo comenzamos pelando y picando , muy picaditos, la cebolla y los ajos. Pelamos la zanahoria y la cortamos a rodajitas. Picamos el pimiento en cuadraditos.
En una olla ponemos 4 o 5 cucharadas de aceite de oliva y cuando esté caliente añadimos los ajos, el pimiento y la zanahoria. Sofreímos un poco e incorporamos la cebolla. Cuando veamos que la cebolla está empezando a coger color, ponemos en la olla la pechuga de pollo troceada y salpimentada. Dejamos hacer la carne hasta que cambie de color y se dore un poco.Ahora incorporamos al guiso la carne de pimiento choricero, las hojas de laurel y el tomillo. Añadimos el vaso de vino y dejamos evaporar 2 o 3 minutos. Cubrimos con los dos vasos de caldo y dejamos hacer hasta que la carne esté tierna y nos quede una salsita.
Y ya tenemos listo nuestro guiso de pechuga de pollo con tomillo. No dejéis de probarlo porque el olor y el sabor os van a encantar.


sábado, 23 de marzo de 2019

Tarta de galletas y moka


Hoy os traigo otro rico postre, una tarta de galletas y moka que estoy segura os va a encantar.
Una de las tartas más sencillas y más buenas que hay es sin duda la tarta de galletas y aunque la tarta de galletas por excelencia, la de los cumpleaños de nuestra infancia, la de la abuela, es la tarta de galletas con crema y chocolate, hoy os traigo otra versión con crema de mantequilla y café.
Me encanta esta tarta no solo porque es fácil de hacer y ya sabéis que a mi me gustan las cosas sencillas, sin complicaciones, sino por su sabor ya que está ¡¡riquísima!!
Animaros a hacerla y me decís.

Ingredientes:
-36 galletas rectangulares
-250 gr de mantequilla a temperatura ambiente
-2 vasos de café
-3 cucharadas de azúcar
-Un chorrito de brandy
-50 ml de leche
-Almendra crocanti
-Bolitas de chocolate

Elaboración:
Para hacer nuestra tarta de galletas y moka comenzamos preparando la crema y para ello, disolvemos el azúcar en el café recién hecho. Ponemos la mantequilla en un bol amplio y la trabajamos con unas varillas hasta que se ponga cremosa. Ahora añadimos, poco a poco, el café azucarado y seguimos batiendo con las varillas. Continuamos añadiendo el café que la mantequilla admita, en total un vaso de café más o menos. Nos tiene que quedar una crema lisa con una textura fina pero no demasiado líquida. Reservamos la crema.
Al café restante le añadimos el brandy.
Templamos un poco la leche y le añadimos el café que nos ha quedado después de hacer la crema.
Ahora comenzamos a montar la tarta de galleta. En la bandeja donde vayamos a presentarla ponemos un poquito de la crema de moka y la untamos, para que cuando pongamos las galletas no se nos muevan.
Vamos mojando las galletas en la leche con el café y el brandy y las vamos colocando alineadas de 2 en 2 en la bandeja. Yo he puesto de base 6 galletas. Sobre la base de galletas untamos una capa de crema de moka y la extendemos bien procurando que cubra todas las galletas de forma uniforme. Vamos alternando capas de galletas mojadas en café y capas de crema de moka, hasta un total de 6 capas de galleta. Terminamos cubriendo con crema, procurando cubrir toda la superficie y los lados de la tarta. Alisamos bien tanto la superficie como los laterales de la tarta  para que nos quede bonita y la decoramos con almendra crocanti y bolitas de chocolate. Metemos la tarta en la nevera hasta la hora de servir.



miércoles, 20 de marzo de 2019

Solomillo de cerdo con salsa de pimientos del piquillo



A ver si os gusta este solomillo en salsa de pimientos del piquillo, en casa nos gusta mucho a todos y espero que si os animáis a hacerlo os guste a vosotros también.
La salsa de pimientos del piquillo es muy sencilla, tiene un sabor muy suave y con ella puedes servir tanto carnes a la plancha como hechas al horno. Queda ideal con el solomillo o el lomo.
Para elaborar esta receta he vuelto a confiar en el aceite de oliva virgen extra Conde de Benalúa Especial que le da un toque único, debido a la mezcla de sus tres tipos de aceituna: Picual, Arbequina y Hojiblanca.

Ingredientes:
-1 solomillo de cerdo
-5 o 6 pimientos del piquillo dependiendo de lo grandes que sean
-1/2 cebolla
-1 diente de ajo
-70 ml de caldo de carne
-30 ml de nata para cocinar
-unas ramitas de tomillo fresco
-aceite de oliva virgen extra Conde de Benalúa Especial     
-pimienta negra
-sal

Elaboración:
Picamos la cebolla y el ajo, los rehogamos en una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal a fuego medio.
Picamos en trocitos los pimientos del piquillo y cuando esté blandita la cebolla, los añadimos a la sartén junto con el caldo de carne, dejamos cocer 2 o 3 minutos. Incorporamos la nata y lo dejamos un minuto más. Pasamos todo al vaso de la batidora y lo trituramos bien hasta que nos quede una salsa fina . Ponemos unas hojitas de tomillo fresco y reservamos.
Precalentamos el horno a 180ºC.
Salpimentamos el solomillo de cerdo.
En otra sartén ponemos un poco de aceite de oliva virgen extra y doramos el solomillo por todos lados hasta que tenga un buen color dorado. Lo retiramos de la sartén, lo ponemos en una fuente y lo metemos en horno. Dejamos hacer  unos 10 minutos más.
Retiramos el solomillo del horno y lo cortamos por la mitad o en medallones, como prefiráis. Lo emplatamos sobre una base de nuestra salsa de pimientos del piquillo y adornamos el plato con unas ramitas de tomillo fresco y unas gotas de aceite de oliva.

lunes, 18 de marzo de 2019

Alcachofas a la montillana


Las alcachofas a la montillana son una receta tradicional de la gastronomía cordobesa, un plato muy sabroso y nada difícil de elaborar. Podemos servirlas como aperitivo, como entrante, como guarnición o como plato único para una cena. Su nombre proviene del vino blanco utilizado para su elaboración, procedente de la Denominación de Origen Montilla-Moriles.

Ingredientes:
-1 kg de alcachofas
-100 gr de jamón serrano en tacos
-1 vaso de vino blanco Montilla-Moriles
-3 dientes de ajo
-1 ramita de hierbabuena
-1 cebolla pequeña
-1 cucharada sopera de harina de trigo
-1 limón
-Unas hebras de azafrán
-Aceite de oliva virgen extra
-Sal

Elaboración:
Para cocinar las alcachofas a la montillana, lo primero que hay que hacer es limpiar las alcachofas. Quitamos todas las hojas exteriores más duras hasta llegar a las tiernas. Cortamos las puntas de las hojas restantes para dejar sólo el corazón de las alcachofas. Las cortamos en varios trozos dependiendo de su tamaño y las ponemos en un recipiente con agua, un poco de sal y el limón cortado en cuatro trozos. Las ponemos a hervir hasta que estén casi tiernas. Quitamos el limón que sólo nos sirve para que las alcachofas no se pongan negras, las escurrimos y las reservamos. Reservamos también un poco del agua de la cocción.
En una sartén ponemos un fondo de aceite de oliva virgen extra y sofreímos la cebolla y los ajos pelados y picados. Cuando empiecen a dorarse incorporamos el jamón en tacos y rehogamos un poquito. Añadimos la cucharada de harina, removemos e incorporamos las alcachofas, la ramita de hierbabuena, las hebras de azafrán y el vino Montilla-Moriles. Dejamos reducir hasta que se consuma el alcohol y rectificamos el punto de sal. Si quedase una salsa muy espesa podemos añadir un poco del agua de la cocción de las alcachofas.

miércoles, 13 de marzo de 2019

Bizcocho de zanahoria y naranja


Aunque mayoritariamente asociamos su uso en cocina a platos salados, la zanahoria forma parte también de un buen número de recetas de repostería, dado su sabor dulzón. Hoy te propongo un ejemplo en forma de delicioso bizcocho de zanahoria y naranja. Este toque cítrico le aporta un sabor y un aroma irresistibles. El resultado es un bizcocho húmedo y jugoso, muy aromático y suave con un bonito color naranja.
Seguro que esta receta de bizcocho de zanahoria y naranja se convertirá en una de vuestras favoritas y mirad que fácil es...

Ingredientes:
-200 gr de harina de trigo
-200 gr de azúcar
-3 huevos
-250 gr de zanahoria rallada
-Zumo y ralladura de la piel de una naranja
-1 sobre de levadura química
-150 ml de aceite de oliva suave
-Azúcar glass para decorar

Elaboración:
Precalentamos el horno a 180ºC.
Para preparar nuestro bizcocho de zanahoria y naranja primero pelamos y rallamos, con un rallador las zanahorias. Reservamos.
En un bol amplio ponemos los huevos y los batimos durante un par de minutos con unas varillas. Añadimos el azúcar y seguimos batiendo. Ahora incorporamos, poco a poco, al aceite de oliva sin dejar de batir. Agregamos la zanahoria rallada, el zumo y la ralladura de la piel de naranja y mezclamos hasta que se integren bien. Tamizamos la harina junto a la levadura  y la añadimos, poco a poco al bol, mezclando hasta conseguir una masa uniforme.
Vertemos la masa en un molde redondo al que habremos puesto papel vegetal y horneamos, con calor arriba y abajo, durante unos 40 minutos aproximadamente. Pinchamos el bizcocho en el centro con un palillo y, cuando veamos que sale limpio retiramos el molde del horno. Dejamos enfriar.
Una vez se haya enfriado lo desmoldamos y lo decoramos con azúcar glass.





domingo, 10 de marzo de 2019

Merluza en salsa de avellanas



Hoy vamos a preparar otra receta de pescado, una rica merluza en salsa de avellanas.
La merluza con una buena salsa siempre es éxito asegurado y  esta que os traigo hoy os va a sorprender por lo sencilla y lo rica que queda.
Para elaborar este plato de merluza en salsa de avellanas he vuelto a confiar en el aceite de oliva virgen extra Conde de Benalúa Especial, un aceite elaborado con las aceitunas de mayor calidad recolectadas en los Montes Orientales de Granada, a los lindes de Sierra Nevada a más de 1500 metros de altura. Cosechado en unas condiciones de temperatura extremas que lo hacen único.
Y ahora vamos con la receta de merluza en salsa de avellanas.

Ingredientes:
-6 rodajas de merluza
-200 gr de gambas peladas
-200 gr de guisantes cocidos
-1/4 de almejas
-1/4 de mejillones
-20 avellanas
-1 hoja de laurel
-1 vaso grande de caldo de pescado
-1 cebolla
-1 tomate rallado
-1 cucharada de tomate frito
-2 dientes de ajo
-Un poco de perejil picado
-5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra Conde de Benalúa Especial
-sal

Elaboración:
Para preparar la merluza con salsa de avellanas ponemos el aceite de oliva virgen extra en una cazuela y doramos un poquito las rodajas de merluza sazonadas con una poca de sal. Cuando estén marcadas las retiramos y las reservamos en un plato.
En ese mismo aceite ponemos los ajos pelados y laminados y el perejil picado y cuando el ajo empiece a tomar color añadimos la cebolla pelada y cortada en juliana. La pochamos a fuego bajo unos dos minutos y añadimos el tomate triturado, dejamos hacer unos 3 minutos más.
Limpiamos bien los mejillones y las almejas. Reservamos.
Ahora agregamos a la cazuela el caldo de pescado, el laurel y la cucharada de tomate frito, las almejas y los mejillones, cocinamos a fuego suave unos 5 minutos más. Retiramos la cazuela del fuego, sacamos la hoja de laurel y la tiramos, sacamos también las almejas y los mejillones y los reservamos en un plato. Incorporamos  las avellanas al líquido de la cazuela y con una batidora lo trituramos todo bien hasta conseguir una salsa fina. En este momento volvemos a poner en la cazuela las rodajas de merluza, las almejas, los mejillones, las gambas y los guisantes y damos un hervor al conjunto durante unos dos minutos. Apagamos y ¡listo! ya tenemos nuestra merluza en salsa de avellanas lista para servir, podemos hacerlo directamente en la cazuela o individualmente como he hecho yo.

viernes, 8 de marzo de 2019

Gallina en leche


No os extrañéis, pese a su nombre, se trata de un riquísimo dulce. "La gallina en leche" es un dulce típico de Porcuna, un municipio de la provincia de Jaén, es de origen árabe y tiene un sabor y una textura muy parecida al alfajor o al mazapán. Se cree que puede ser una versión hecha al horno del "manjar blanco", plato muy común en la Edad Media que con el tiempo pasó a hacerse sin carne, que ya ha quedado solo en el nombre.


La receta de la gallina en leche fue llevada en 1936, durante la guerra civil, por las monjas dominicas de Porcuna al convento de Madre de Dios, en Sevilla, en el cuál se refugiaron. Desde entonces es uno de los dulces de mayor éxito que realiza esta congregación religiosa.
Espero que disfrutéis de este rico manjar, un dulce que nos trae todo el sabor de la repostería tradicional.

Ingredientes:
-250 ml de leche
-170 gr de azúcar
-125 gr de almendra molida
-75 gr de pan rallado
-3 huevos
-Una cucharadita de canela molida
-Azúcar glass para decorar


Elaboración:
Para preparar la gallina en leche ponemos en un cazo la leche, la almendra molida, el azúcar, el pan rallado y la canela. Mezclamos bien y ponemos el cazo al fuego, removiendo sin parar, durante unos cinco minutos . Retiramos el cazo del fuego y dejamos templar un poco. Ahora batimos los huevos y los vamos incorporando a la mezcla, poco a poco, mientras vamos mezclando. Ponemos el cazo de nuevo en el fuego y seguimos cocinando unos minutos más pero sin dejar de remover.


Untamos un molde con un poco de aceite de oliva y vertemos en él la mezcla. Llevamos al horno, que estará previamente calentado a 180ºC, y lo horneamos durante unos 30 minutos. Sacamos del horno y lo dejamos enfriar bien. Cuando esté frío lo espolvoreamos con azúcar glass y ya tenemos listo nuestro postre de gallina en leche.

jueves, 7 de marzo de 2019

Espárragos trigueros gratinados


Hoy os traigo una receta de verdura, espárragos trigueros gratinados.
El espárrago triguero es el que crece de forma silvestre, y su sabor es mucho más marcado que el de cultivo, que tiene un sabor más suave. El espárrago está en su esplendor en primavera, entre abril y junio, aunque este año, que aquí apenas está haciendo frío, se ha adelantado la temporada y ya puedes encontrarlos en el campo. Ahora podemos encontrarlos en el super durante todo el año, aunque nada que ver con los silvestres. Los espárragos son una verdura que, con muy poco, pueden convertirse en un plato de lujo. Pueden cocinarse de mil maneras pero esta combinación de espárragos, langostinos, jamón y bechamel es deliciosa.

Ingredientes:
-1 manojo de espárragos trigueros
-100 gr de jamón serrano en dados
-100 gr de langostinos cocidos
-1 cebolla morada
-1 zanahoria grande
-2 cucharadas soperas de harina de trigo
-60 gr de mantequilla o margarina
-1/2 litro de leche semidesnatada
-1/2 cucharadita de orégano
-Una pizca de nuez moscada
-Pimienta negra molida
-Queso rallado (el que más os guste)
-Sal
Elaboración:
Vamos con la receta de espárragos trigueros gratinados. En una cazuela ponemos a hervir agua con una cucharadita de sal. Mientras hierve el agua pelamos la cebolla y la zanahoria y las cortamos en aros y rodajitas finas. Cuando el agua esté hirviendo las ponemos en la cazuela y las cocinamos hasta que se vean hechas pero no demasiado blandas. Retiramos de la cazuela y reservamos.
En ese mismo recipiente y en el mismo agua donde hemos cocido la cebolla y la zanahoria, ponemos los espárragos bien lavado, y cortados en trozos no muy pequeños, dejando algunas puntas más grandes para luego decorar, procurando que no se queden demasiado blandos. Escurrimos y reservamos.
En una fuente apta para el horno ponemos los tacos de jamón serrano y cubrimos el fondo. Sobre el jamón repartimos bien la cebolla y la zanahoria y espolvoreamos un poco de queso rallado. Ahora ponemos los langostinos y sobre ellos los espárragos trigueros, reservando las puntas para decorar.
Vamos ahora a preparar la salsa bechamel. Para ello ponemos la mantequilla en una sartén a fuego lento hasta que se derrita. Añadimos la harina y mezclamos con una cuchara hasta que la harina tueste un poquito y pierda el sabor a cruda, pero siempre a fuego lento. A continuación ponemos la leche, la pizca de nuez moscada, un toque de pimienta, el orégano y una poquita de sal. Removemos continuamente con unas varillas para que no se formen grumos y cocinamos a fuego medio hasta que la salsa espese. Vertemos la salsa bechamel por encima de los espárragos procurando que todos los ingredientes queden bien cubiertos. Sobre la bechamel ponemos una buena capa de queso rallado y encima ponemos las puntas de espárragos que habíamos reservado para decorar.
Metemos la fuente en el horno a 200ºC y gratinamos hasta que la superficie esté doradita.
Servir calientes.



martes, 5 de marzo de 2019

Tortitas de calabacín y salsa de yogur


Estas tortitas de calabacín son muy saludables y fáciles de preparar, resultan estupendas para un picoteo o como guarnición para cualquier menú y  una forma ideal para hacer que los niños coman verdura casi sin darse cuenta. El calabacín es una verdura muy versátil y queda muy bien tanto en recetas de cremas como en platos de pasta o ensaladas e incluso en bizcochos. Para acompañar estas tortitas de calabacín he optado por una salsa de yogur y menta que les aporta frescura y cremosidad. Esta salsa de yogur está lista en unos minutos y va muy bien para aderezar ensaladas, kebab, pescados ,carnes o platos de pasta.

Ingredientes para las tortitas:
-1 calabacín mediano
-1 patata también de tamaño mediano
-20 gr de queso parmesano en polvo
-Pimienta negra
-Aceite de oliva virgen
-Sal
Ingredientes para la salsa de yogur:
-1 yogur griego natural
-1/2 diente de ajo o 1 si es pequeño
-5 o 6 hojas de hierbabuena o menta fresca
-Zumo de 1/2 limón
-Pimienta negra
-Un chorrito de aceite de oliva virgen
-Sal

Elaboración:

Con estas cantidades salen unas 12 tortitas.
Comenzamos preparando la salsa de yogur y para ello ponemos en el vaso de la batidora, el yogur, el ajo, el zumo de limón, la pimienta, el aceite de oliva y la sal. Trituramos todo durante apenas un minuto y ya la tenemos lista. Picamos con un cuchillo las hojas de hierbabuena o menta y las agregamos a la salsa. Reservamos en la nevera hasta la hora de consumirla. Lo ideal es prepararla unas horas antes para que repose y esté más buena.


Ahora vamos con las tortitas de calabacín. Precalentamos el horno a 200ºC y preparamos la bandeja con papel vegetal sulfurizado.
Lavamos y secamos bien el calabacín. Lo rallamos con un rallador de agujeros gruesos y lo colocamos sobre un colador con un poco de sal. Lo dejamos escurrir por lo menos media hora presionando de vez en cuanto para que suelte todo el agua.


Mientras tanto ponemos la patata, con su piel, en una olla al fuego y dejamos cocer unos 20 minutos hasta que pueda pincharse con un palillo, pero sin que llegue a ponerse muy blanda. Cuando esté en su punto la escurrimos y la dejamos enfriar. Pelamos la patata y la rallamos con el mismo rallador grueso que hemos rallado el calabacín. Ponemos la patata rallada en un bol y añadimos el calabacín bien escurrido. Salpimentamos e incorporamos el queso en polvo. Mezclamos todo muy bien.
Con una cuchara vamos cogiendo porciones de la mezcla para hacer una especie de albóndiga que luego aplastaremos para darles la forma de tortita. Distribuimos las tortitas en la bandeja del horno y las pincelamos con un poco de aceite de oliva. Horneamos hasta que estén doradas, unos 30 minutos, dándoles la vuelta a los 15 minutos de horneado para que se doren bien por los dos lados.
Servimos las tortitas de calabacín recién hechas para que estén bien calientes y acompañadas de la salsa de yogur.